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Manjares divinos a través de Facebook

Renovarse o morir. Esa es la premisa que han seguido las hermanas del Convento de Santa Clara que desde hace varios meses tienen abierta permanentemente su ventana al exterior a través de Facebook y desde el que enseñan el extenso catálogo de dulces elaborados artesanalmente.

Sor María del Águila es la artífice de que un lugar frío e impersonal como puede llegar a ser este mundo cibernético se llene cada día de mensajes de paz y buenos deseos. Sii no da los buenos días, da las buenas noches, o si no, nos muestra cómo se realizan las labores diarias del convento o cómo se elaboran las torteras de polvorón, las pastas de chocolate o los huesos de santos, incluso llega a fotografiar los rincones menos visibles del claustro. Pequeños detalles que nos acercan a una comunidad que pasa desapercibida para la gran mayoría de los alcalareños.

Pero sin duda, la gran visión tecnológica que ha tenido Sor María del Águila reside en hacer llegar a un sinfín de lugares los dulces que realizan artesanalmente en los hornos del convento. En las pasas Navidades, una corriente alcalareña llamó a la colaboración con la congregación únicamente adquiriendo sus productos, con la dificultad de que éstos únicamente podían conocerse a través del boca a boca o preguntando directamente a las monjitas.

Hoy todo ha cambiado. Desde el perfil “Convento Alcalá Dulces Artesanos” se muestran todos esos manjares divinos que realizan las hermanas clarisas. Desde los huesos de santo a las tartas de cumpleaños con el mismísimo Spiderman, pasando por las pastas de almendras, los mantecados de hoja, las yemas de huevo o los cada vez más cercanos roscones de Reyes. Todos muy indicados para endulzarnos la vida en los momentos que más nos hacen falta.

La idea de abrir esta ventana al exterior facilitará la tarea de dar a conocer y de vender unos productos que, como suele decirse, entran directamente por los ojos. Busquen el perfil en Facebook y empápense de mensajes de ilusión y cariño desinterado, alimenten la vista con las fotos de los dulces, y si pueden, adquieran una de esas cajitas de dulces elaborados con más amor que azúcar.