Entrevistas

«Nuestra intención nunca ha sido salir en procesión con el Cristo de la Vera Cruz»

El mundo cofrade vive en una constante vorágine de rumores y comentarios que en ocasiones distan infinitamente de la realidad. Éste podría ser el caso de aquéllos que giran en torno a la Sección Alcalareña de la Adoración Nocturna,  una archicofradía cuyo primer y más importante fin es el culto al Santísimo, y a la que muchos ya atribuyen una futura estación de penitencia desde el Convento de Santa Clara. Nada más lejos de la realidad. Juan Jorge García, presidente de la Sección; José Antonio López, vicepresidente; Juan Gutiérrez, tesorero; y Francisco Burgos, nos dibujan el camino por el que camina la Adoración Nocturna de Alcalá.

-¿A qué se dedica la Sección Alcalareña de la Adoración Nocturna en su día a día?

A adorar al Santísimo. Orar y reparar, esa es nuestra premisa.

-¿Hasta dónde llega la importancia el reconocimiento de afiliación a la Orden Franciscana recibido el mes pasado?

Esto se circunscribe dentro de la celebración del Año Jubilar, además que se han dado una serie de circunstancias que han hecho más especial el nombramiento. Se pidió el 23 de septiembre, que es el día del hallazgo de Santa Clara y desde Roma nos llegó el día 4 de octubre, festividad de San Francisco de Asís, el decreto firmado por el Ministro General de la Orden.

Al estar dentro de una orden religiosa contamos con todas las prerrogativas, se nos conceden todos los títulos de la Orden Franciscana. Pero lo más importante es la responsabilidad que adoptamos a partir de ahora: ratificarnos en dar a conocer a Jesús Sacramentado, participar del carisma y la fraternidad franciscana, esa es la visión más acertada.

-¿Cómo han llegado un Cristo crucificado y una Virgen a manos de la Adoración Nocturna?

Son dos donaciones que hemos recibido por parte de particulares. El crucificado se nos regala con la premisa de ser repuesto al culto y la Virgen también se donó con la idea de recuperar en Alcalá una advocación muy importante en Alcalá, como es el de Consolación. Son dos regalos de Dios puestos en nuestro camino quién sabe por qué.

-¿Cómo son las imágenes?

El Cristo de la Vera Cruz es un crucificado de tamaño natural realizado en pasta de maíz, fechado en el siglo XVII y de procedencia mexicana. Éstas características son las que nos han permitido firmar un convenio con la Universidad de Sevilla, quien está usando las técnicas más modernas de análisis para realizar su investigación, tanto es así que este análisis está abriendo un nuevo camino en el mundo de las investigaciones de obras de arte. Sí podemos asegurar que la policromía original, de cuatro capas que tiene en total, es la mejor y será recuperada.

En cuanto a la Virgen de Consolación y Reina de los Ángeles, es de finales del siglo XVIII, está en perfectas condiciones, de algo más de un metro y muy parecida a la Virgen de Consolación de Utrera.

-¿Por qué esas advocaciones?

El donante del Cristo pedía que se restituyera al culto como Santísimo Cristo de la Vera Cruz, un nombre muy francisco y con el que recuperamos una advocación antiquísima en Alcalá y que se perdió.

En el caso de la Virgen, la donación ha sido como Virgen de Consolación, pero al estar en la Orden Franciscana nosotros también le hemos nombrado Reina de los Ángeles.

-¿Qué fechas se manejan para poder ver al Señor y la Virgen?

Estamos ante dos casos muy distintos. La restauración del Cristo se fijó en dos años, probablemente hasta septiembre u octubre del próximo año no estará con nosotros.

La Virgen sí podría haber sido bendecida ya, teníamos previsto el acto para septiembre, pero por diversos motivos aún no ha podido ser. Estamos a la espera de cerrar temas burocráticos.

-Muchos alcalareños pensaban que la Virgen a la que ibais a dar culto era la que residía ya en el Convento.

No, en absoluto, no tienen nada que ver. La Virgen de los Ángeles que está con las Clarisas tiene unos propietarios particulares. En nuestro caso hablamos de una talla nueva donada por una familia.

-Y hablando de las tallas, muchos ya hablan de una posible hermandad en el Convento…

No, no es eso. En nuestros estatutos se recoge el culto a unos sagrados titulares. Ahora el Santísimo Cristo de la Vera Cruz y la Virgen de Consolación son nuestros titulares junto al San Francisco de Asís y Santa Clara. Ni ha sido ni será nuestra intención u objetivo realizar una estación de penitencia desde el Convento.

Cuando las imágenes estén con nosotros serán colocadas en su lugar correspondiente donde le daremos culto. Además, logísticamente no sería lógico realizar una procesión de tales características desde aquí. No permitiríamos a las hermanas clarisas poder celebrar dignamente los cultos en Semana Santa ya que por espacio, si hubiera un paso, le taparíamos la visión desde la clausura.

-¿De ninguna manera veríamos a las imágenes en la calle?

No descartamos que la Virgen pudiera salir en la procesión del Corpus Christi. Tampoco nos negaríamos a que el Cristo, en caso de que alguien nos lo pidiera de manera extraordinaria o si así lo tuviéramos a bien, saliera en vía crucis.

A través de las imágenes esperamos que se acerquen más personas a nuestra archicofradía, pero nuestro principal objetivo seguirá siendo el culto al Santísimo Sacramento.

-¿Por dónde pasan los planes de futuro de la Adoración?

Por adorar al Santísimo, no hay más.

-¿Cuál es el estado de salud de la Sección Alcalareña de la Adoración Nocturna?

No podemos dejar de reconocer que somos un grupo pequeño, ojalá fuéramos muchos más. Pero los que somos adoradores lo somos hasta el final. Pese al número, la salud es muy buena.

-¿Cómo se consigue atraer a la gente?

Es difícil hacerlo. En nuestra sociedad es complicado atraer a alguien para orar mientras a esa misma hora puede estar pasándolo bien. Muchos son los llamados, pero pocos los elegidos.

-¿Falta formación?

Sí, y sin ella es difícil llegar a la oración convencida que te llama a orar ante el Santísimo. Pero sí es seguro que una vez que te postras frente a Él por su llamada, tienes la necesidad de hacerlo más veces. Sólo hace falta entender que Cristo está en la Eucaristía.

-Quizás también los alcalareños desconocen la existencia de la Adoración Nocturna.

Alcalá nos conoce perfectamente, pero parece que no nos quieren conocer. Todas las hermandades nos conocen muy bien, pero quizás no se quiere tener cierto compromiso con nosotros.

Aun así nosotros seguiremos por nuestro camino, y por eso en los últimos tiempos nos estamos moviendo más en ciertos ámbitos. Quizás por ahí, pueda acercarse alguien que se interese por nuestra labor.

-Para acabar. Definan a las hermanas clarisas.

Son puro amor, tanto a Cristo como al prójimo. Ahora mismo el mejor lugar para encontrar a Dios es estar junto a las esposas de Dios. ¿Dónde podríamos estar mejor que aquí con ellas?

De izquierda a derecha: José Antonio López, Juan Jorge García, Francisco Burgos y Juan Gutiérrez