Las de Jesús, las manos de la apertura
El besamano de Jesús Nazareno se ha convertido ya en una tradición inexorable para la ciudad. El Miércoles de Ceniza y las manos del Nazareno de Santiago forman ya una dupla inquebrantable a la que se aferra el pueblo con gran firmeza, y es que las estampas que se pueden vivir allí junto al Señor son una estampa patente de ello, estampas que, por cierto, dejan huella.
Un reguero incesante de cientos de devotos se postró ante Jesús para rendir una pleitesía que se renueva siempre por las mismas fechas. Oraciones calladas, caricias con las manos, besos delicados, miradas de Esperanza, detalles todos estos que forman parte de un Miércoles de Ceniza que arranca, para Alcalá, en la Parroquia de Santiago.